No tenemos palabras para describir la experiencia que vivimos en el día de ayer. Bueno, sí, podríamos dar muchos adjetivos con los que calificarla (sensacional, exigente, divertida, emocionante, sorprendente....) pero aún así, no conseguiríamos trasmitir totalmente, la sensación de satisfacción experimentada.
Parece increible, que con algo tan sencillo como una bicicleta de montaña, podamos vivir experiencias tan fantásticas. Cierto es, que hay que añadirle unas pequeñas dosis de algo fundamental: excelentes compañeros de viaje y un entorno natural impresionante. De lo primero, en el Club Ciclista la Cañada hay de sobra. Con bikers (algunos con unos cuantos añitos a sus espaldas) que apenas pegan ojo la noche antes, esperando que llegue el momento de ponerse en pie, sólo se pueden esperar cosas buenas. Y en cuanto a entorno natural, la zona de las Villuercas es totalmente impresionante.
El Camino Natural de las Villuercas, que hemos realizado, se inicia en Logrosán, en la antigua, y nunca estrenada, estación de trenes (justo en el punto donde termina la Vía Verde Villanueva de la Serena - Logrosán) Este camino, en total tiene 70 kilómetros, pero nosotros hemos tomado el desvío que lleva a Guadalupe, por lo que en total hemos recorrido alrededor de 35 kilómetros, habiendo empleado 4 horas en el trayecto (descansos incluidos)
Momento previo al inicio de la ruta |
Instalaciones antigua estación de tren de Logrosán |
La ruta es sensacional y exigente, totalmente rompepiernas, pues es un continuo subir y bajar, con rampas, perfectamente señalizadas, con porcentajes de pendiente de todas las numeraciones posibles.... En cuanto a dificultad, destaca, por su dureza, la larga subida al puerto de Puerto Llano, que tiene una pendiente del 20%; por otro lado, por su tecnicidad, destaca una subida con un 14% de pendiente, situada unos metros más adelante de Puerto Llano, pero que al ser sobre un terreno de gravilla, exige un plus de habilidad para mantenerse firmes en la bicicleta. En cuanto a belleza del entorno, no cabe duda que el desfiladero de las Villuercas, ha sido lo más comentado. Paisaje espectacular, que una foto no puede mostrar en toda su plenitud y que no tiene nada que envidiar a paisajes de otras zonas de España muy conocidas.
Entrada a Cañamero |
Ermita de Santa Ana. Cañamero |
En el festival medieval |
Desfiladero de las Villuercas |
Desfiladero de las Villuercas |
Subida a Puerto Llano |
Para los detalles técnicos de la ruta, os dejamos enlace de wikiloc, que incluye el track de la ruta y que nosotros hemos utilizado como guía, ya que está muy bien detallado (sobre todo leeros los comentarios que explican todo pormenorizadamente)
No obstante, os dejamos algunas anotaciones, a modo de resumen y con el objetivo de facilitaros el camino, en el caso que os animéis a hacer la ruta:
- El recorrido está muy bien señalizado.
- El trayecto es totalmente ciclable. Tan solo dos kilómetros antes de llegar a Guadalupe, justo en la rotonda, donde decidimos tomar la carretera, porque el camino está lleno de maleza y para las bicis era muy complicado.
- En Cañamero, una vez pasada la Ermita de Santa Ana, los postes de señalización nos llevaron hasta una plazoleta, donde no veíamos más señales.... Tras preguntar a varios vecinos, nos aconsejaron que continuásemos todo recto, para tomar la carretera que atraviesa el pueblo y que lleva hasta Guadalupe. Una vez pasado el pueblo, hay un gran parque a la izquierda. Justo frente a ese parque, sale un camino a la derecha, que rápidamente pica hacia arriba y que es el que hay que tomar. Al final de ese camino, se retoma de nuevo la señalización del Camino Natural.
- Justo a partir de Cañamero es donde empiezan los tramos más duros y a la vez, los más espectaculares para la vista.
- Justo a partir de Cañamero es donde empiezan los tramos más duros y a la vez, los más espectaculares para la vista.
Con todo, tras reir con la gran cantidad de anécdotas que nos han ido pasando, tras encontrarnos, de repente, inmersos en un festival medieval en la calles de Cañamero, tras sufrir las continuas subidas y bajadas, tras ser testigos de cómo uno de los miembros del grupo tomaba un inesperado baño de barro (muy bueno por su poder exfoliante para la piel...... por cierto) tras hacernos múltiples fotos, en puentes en cumbres, en valles.... llegó el momento en el que avistamos la población de Guadalupe, presidida por su imponente Monasterio, momento de gran satisfacción para el grupo, ya que significaba que nuestro objetivo estaba muy próximo y que el trabajo más duro ya estaba hecho.
La Cañada sobre el río Ruecas... |
Puente sobre el río Ruecas |
A las puertas de Guadalupe |
Una vez dentro de la población, nos dirigmos directamente al Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, donde nos hicimos las correspondientes fotos de rigor, tras lo cual, nos encaminamos a un restaurante, para tomar unas cervezas bien frías y darnos un gran homenaje en forma de comida, de la que dimos buena cuenta.
Caras de satisfacción |
Foto de grupo a las puertas del Real Monasterio |
Para concluir, nos gustaría hacer un par de apreciaciones:
- Recomendamos a todos los ciclistas que puedan, que hagan esta ruta, puesto que es digna de ser realizada.
- Viajar y conocer mundo, es un gran placer y además enriquece nuestras vidas, no obstante, conocer otros paisajes y otras culturas, no es incompatible, con conocer y poner en valor, el rico patrimonio cultural y natural, que tenemos en Extremadura. Conozcamos nuestros bellos paisejes, realicemos actividades deportivas en nuestro entorno, a veces, no hace falta ir muy lejos, para disfrutar grandes experiencias que podemos vivir en nuestra propia tierra.
- Una vez más, Extremadura, con sus paisajes y sus gentes, vuelven a sorprendernos muy gratamente.
- Una vez más, Extremadura, con sus paisajes y sus gentes, vuelven a sorprendernos muy gratamente.
No queríamos concluir esta crónica, sin dar las gracias a l@s bikers que nos han acompañado en esta ruta. Gracias por ser tan buena gente y por hacer que lo que, en un principio, parece muy difícil de organizar, al final, resulte muy sencillo de llevar a la práctica.
Lo dicho, si quieres disfrutar de esta experiencia, no dejes que te lo cuenten, vívela directamente.
Saludos y hasta la próxima¡¡¡¡¡¡¡¡
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